Seguimos con nuestra serie de consejos sobre cómo disfrutar un vino al máximo y en esta ocasión hablaremos de cómo decantar un vino correctamente, para sacarle el máximo provecho.
Primero que nada debemos saber qué es un decantador. Un decantador de vino es una botella de cristal de una forma muy característica, normalmente con un cuello alargado y una base mucho más ancha que el cuello, cuya finalidad principal es airear el vino, especialmente de aquellos vinos que tienen más de dos años y que pueden contener en su botella algunos restos sólidos. Igual que para los seres humanos, también para el vino, el oxígeno es un elemento fundamental, y en ocasiones al haber estado varios años en una botella, necesita respirar antes de que esté perfecto para ser consumido y apreciar todas las propiedades y aromas del vino que queremos degustar.
Pero para decantar un vino de la forma apropiada, debemos seguir algunas indicaciones y consejos que queremos darte a conocer a continuación.
1. Decantar en el momento de consumo
El momento de decantar un vino es justo antes de su consumo, puesto que cuando permanece más tiempo del necesario en este recipiente puede perder vitalidad y frescura. Así mismo, no es necesario que decantemos todos los vinos, sino preferiblemente aquellos que consideremos que pueden tener restos sólidos o posos dentro de la botella, que suelen ser aquellos que han pasado largo tiempo en ella y que además necesitarán el tan ansiado oxígeno para que puedan respirar después de no catar el aire durante un largo periodo.
2. Envinar el decantador
Y te estarás preguntando… ¿en qué consiste envinar el decantador? Pues muy fácil, simplemente consiste en decantar primeramente un poco de vino en el decantador y moverlo con el vino dentro, de modo que este toque todas las paredes de la base del mismo. El objetivo que perseguimos es aromatizar las paredes del mismo antes de vertir en él el resto de la botella por si quedara un poco de agua de haberlo lavado o de polvo de tenerlo en el armario, y así nos aseguramos de que una vez decantemos el resto, el recipiente ya tenga el aroma propio del vino que queremos degustar. Una vez hayamos hecho esto, volveremos a pasar el vino a la copa y lo probaremos para asegurarnos de que está en óptimas condiciones y empezaremos a decantar de este modo el resto de la botella.
3. Decantar el vino de la forma adecuada
Una vez hemos aromatizado con las primeras gotas de vino, las paredes de la base del decantador, ya podemos proceder a la decantación del resto del vino. Para ello debemos asegurarnos de hacerlo al aire, es decir, que las paredes del cuello del decantador no toquen la botella de vino al vertirlo sobre el recipiente. Además debemos inclinar ambos, para que al realizar la decantación el vino baje deslizándose por el cuello hasta llegar a la base y así nos aseguramos que el vino no descienda brusca y violentamente.
4. Decantar el vino a una velocidad uniforme
Tenemos que conseguir que cuando vertamos el vino sobre el decantador, se haga a una velocidad moderada y uniforme para que no caigan parte de los restos sólidos de la botella en la base del recipiente.
5. No verter la botella entera en el decantador
Cuando hayamos decidido decantar un vino, mejor no decantar por completo la botella y dejar al menos un dedo de vino dentro de la misma, puesto que probablemente aquí se encuentren la mayor parte de los restos sólidos, especialmente en aquellas botellas más añejas.
Esperamos que te haya servido de gran ayuda y conozcas ahora cómo decantar un vino correctamente. Si quieres seguir adquiriendo más conocimientos para disfrutar al 100% los vinos que consumes, puedes revisar otros post sobre cómo catar un vino y la temperatura adecuada para servir un vino.
Por cierto, no te olvides de compartir este post en las redes sociales de tus amigos amantes del vino, seguro que te agradecerán que les des a conocer estos consejos 😉